
TAYLOR SUMPTION: CULTIVO DE AVENA EN SUELO ESTADOUNIDENSE
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En 1882, Estados Unidos era muy diferente a lo que es hoy. Casi la mitad de la fuerza laboral estadounidense estaba compuesta por agricultores, lo que convertía la agricultura en la industria más importante del país. En Dakota del Norte y Dakota del Sur, las granjas estaban en auge en aquel entonces. Las plagas habían disminuido, llovía mucho y los nuevos ferrocarriles conectaban las praderas de las Dakotas con el resto del país, lo que permitía a los agricultores llegar a los mercados de las ciudades más grandes de Chicago y San Luis.
Al igual que muchas otras familias de la época que buscaban una vida pacífica y trabajadora, los antepasados de Taylor Sumption establecieron un terreno en Frederick, Dakota del Sur, y construyeron un legado agrícola, que continúa hasta el día de hoy con el negocio de Sumption, Anthem Oats, cultivado en tierras cultivadas por la quinta generación de la familia.
Para Sumption, Anthem Oats es más que un negocio familiar. Representa su compromiso con la salud a largo plazo de su tierra. También simboliza su determinación para superar los desafíos que incitan a otros a abandonar sus legados familiares.
Para Sumption, alejarse de su tierra nunca será una opción.
GESTIÓN DE RIESGOS Y RECOMPENSAS
Sumption creció en el estilo de vida agrícola. Estudió agricultura general en la Universidad Estatal de Dakota del Sur y luego regresó a casa para aplicar esos conocimientos en la granja familiar. Años de experiencia y formación en el sector le impulsaron a analizar con mayor detenimiento qué debían cultivar y cómo hacerlo.
Cuando la agricultura era la industria más grande de Estados Unidos, los agricultores cultivaban una gama mucho más amplia de cultivos para su propio sustento y el de la comunidad local. Pero a medida que la tecnología mejoraba y la competencia crecía, los agricultores se enfocaron más en el aspecto financiero de su negocio. En una industria donde los márgenes de ganancia lo son todo, elegir solo los cultivos más rentables es una cuestión de supervivencia.
“El agricultor moderno se ve obligado, básicamente, a plantar maíz y soja”, explica Sumption. “La agricultura es un riesgo, pero el maíz y la soja ofrecen la mayor garantía de no perder dinero, así que los bancos te presionan para que lo hagas”.
El agricultor actual se debate entre el éxito a corto y largo plazo. Por un lado, cultivar cualquier otra cosa que no sea maíz y soja puede imposibilitar la amortización de la tierra o cubrir otros gastos. Por otro lado, cuando se cultivan como monocultivo con pesticidas, el maíz y la soja pueden tener efectos devastadores en la salud del suelo, aumentando el riesgo de desastres ambientales a largo plazo. Esta es una de las razones por las que Sumption fundó Anthem Oats.
PONIENDO LA TIERRA PRIMERO
Sumption quería cultivar de una manera que protegiera la tierra y, al mismo tiempo, fuera viable para su familia. Habiendo crecido rodeado de avena, Sumption sabía que era una excelente opción sostenible para su tierra. La veía como un sustento para el suelo y confiaba en poder adaptarse a un modelo de negocio de la granja a la mesa.
“Años de frustración con lo que el sistema de monocultivo agrícola le hace a nuestro suelo, nuestra salud y nuestro medio ambiente me llevaron a diseñar un producto con avena que fuera fácil de cultivar, eficiente, amigable con el medio ambiente y beneficioso para la salud del suelo”, explica.
Sumption y otros investigadores del USDA apenas están descubriendo por qué la avena es tan beneficiosa para el suelo. «La avena reintroduce poblaciones muy altas de hongos específicos y bacterias beneficiosas, lo que aumenta la actividad del suelo y el intercambio de nutrientes entre las raíces», explica Sumption. Se enorgullece de educar a otros sobre los beneficios de la avena como cultivo sostenible y espera inspirar a más agricultores a seguir sus métodos.
VOLVIENDO A LAS RAÍCES DE ESTADOS UNIDOS
En la época de los antepasados de Sumption, la mayoría de la gente conocía a un granjero o era granjero. Pero cuando viajó por el país con su esposa, Sumption descubrió que la brecha entre los agricultores y los estadounidenses no agricultores había aumentado.
“Cuando llegamos a la costa, parecía que muy poca gente entendía la agricultura moderna, lo que hacemos y cómo lo hacemos”, recuerda Sumption. “La idea de hacer algo para intentar cerrar esa brecha siempre me impactó”.
Con Anthem Oats, Sumption espera mostrar un lado de la América rural y de la agricultura que la mayoría de los estadounidenses no llegan a ver.
“Cuando mi tatarabuelo se estableció aquí, no buscaba ganancias. Buscaba un lugar donde vivir, cultivar la tierra y criar una familia con un estilo de vida tranquilo”, explica Sumption. “En los últimos 75 años, nos hemos alejado de eso. Pero creo que la sociedad volverá a la normalidad. Mucha gente se muda a esta zona por la paz y la tranquilidad”.
La responsabilidad de cuidar a los vecinos sigue viva en el pueblo rural de Sumption. Cuando alguien necesita ayuda, la comunidad siempre se moviliza. "En lugares como este, cuando alguien se lastima o enferma, la gente se une para ayudar", dice Sumption. "Es increíble cómo todos aquí se unen y crean ese fuerte sentido de comunidad". Es ese fuerte apoyo lo que impulsa a Sumption a seguir adelante cuando las cosas se ponen difíciles.
En una industria dominada por monocultivos arriesgados, la decisión de Sumption de cultivar avena se debe tanto a la protección del suelo como a la de su futuro. Su resiliencia proviene de raíces profundas: su conexión con la tierra que cultivó su tatarabuelo y una convicción inquebrantable de que la agricultura aún puede priorizar el beneficio ambiental y social a largo plazo por encima de las ganancias rápidas.
“Puedes sentirte un poco desanimado de vez en cuando. Siempre que necesito un empujón, simplemente visito una tienda local o un pueblo donde vendan nuestros productos y charlo con la gente”, dice Sumption. “Esa conexión con los demás, las historias que compartimos, es increíble”.